Un disco que nos lleva por un viaje al lejano oriente acompañados de suaves melodías.
La fusión musical que vamos a encontrar es un estilo de sonidos orientales combinados con géneros funk, electrónica y tintes de disco.
Desde las primera notas se puede sentir la increíble atmósfera oriental, con exquisitos riffs que poco a poco se desprenden en una psicodelia acompañada de la batería que mantiene un bajo ritmo, Pingpxng es la canción que describimos y la responsable de abrir esta producción. Por otra parte One Inch Punch expresa las raíces disco con un beat «tropical» para dar paso a los melódicos solos de guitarra. Thom Kï Kï, incorpora sonidos cercanos a una «jaw harp» aumentado la notas funk.
Lo que me gusta de esta producción es el balance de la psicodelia con los demás géneros creando este ambiente de los 60s pero que al mismo tiempo suena fresco y actual.
Un total de 13 canciones son las que componen a esta producción con una suma de cuarenta y tres minutos.
Mi recomendación es escucharlo a todo volumen.
The Howll 