Introducción
Las tiendas de vinilo han sido, durante décadas, más que simples puntos de venta: son espacios de descubrimiento, conversación y conexión con la música. Sin embargo, en una época donde todo está a un clic, cabe preguntarse si estas tiendas siguen cumpliendo su misión esencial: ayudarte a encontrar algo que no sabías que necesitabas.
Este texto es una reflexión personal — y colectiva — sobre lo que realmente buscamos al cruzar la puerta de una tienda de vinilos. Una recomendación, una plática sobre bandas olvidadas, y sobre todo, ese momento mágico en el que te ponen a sonar algo que termina siendo tu nuevo disco favorito.
El ritual de descubrir música
Una de las cosas que más disfruto al visitar tiendas de vinilos es descubrir música. Es estimulante ver cientos de portadas diferentes e imaginar las notas y composiciones que se esconden detrás de esos diseños.
Me gusta que, al entrar, me pregunten si busco algo en especial. Eso abre la comunicación y la posibilidad de decir: «Oye y sobre este estilo de música (según el artista que pidas), ¿qué otra banda me recomiendas?» Es justo aquí cuando nace la magia de las tiendas de vinilos y aprovecharse del conocimiento de esos curadores musicales.
Guías musicales
Más de una vez he preguntado por una banda o un título en específico y la respuesta ha sido simplemente “no lo tenemos.” Yo esperaría algo más: «No lo tenemos, pero si te gusta esa banda, tal vez te gustaría esta otra»
Ir a una tienda de vinilos debería ser un coqueto musical: descubrir qué puede gustarle al cliente y dejarse seducir por las recomendaciones del vendedor.
Quienes llevan tiempo en el coleccionismo tal vez recuerden a Luigi Buffa +, en la Ciudad de México. Ir a su tienda era garantía de salir con algo bajo el brazo. Una vez pregunté por un disco de Ulver y me dijo: «No lo tengo, pero creo que este podría gustarte.» Me dio un álbum de Jim Jones & The Righteous Mind y me invitó a escucharlo en su sala de audio — un cuarto diseñado especialmente para disfrutar de los vinilos con un equipo espectacular. El disco me encantó, lo compré.

En otra ocasión, durante una visita a 99 Records, mientras hacía digging encontré un vinilo de Sunn O))). Aunque siempre tuve la opción de comprarlo en línea, era una de esas joyas que quería descubrir en una tienda. Mientras pagaba, sonaba el homónimo de Violent Femmes en la tornamesa. Capturó toda mi atención. Le pregunté a Roger por la banda y me contó cada detalle: su sonido, anécdotas e impacto en la música. Sin dudarlo, me lo llevé a casa.
Antes de regresar a Ciudad de México, visité mis tiendas favoritas en Guadalajara. Velvet Records fue la última la parada. Buscaba el último lanzamiento de Chat Pile, Cool World. Mientras hablaba de música con Enrique, me mostró una colección de vinilos de metal a la venta. De alguna forma, terminamos platicando sobre Entropy Death de Fabriccio de la Mora y Tormentas Malsanas de Las Nubes. Ambos los tenía en vinilo y los puso en la tornamesa. Por cuestiones de presupuesto (una mudanza en puerta), no me los lleve, pero espero pronto regresar por ellos.

¿A que vamos a una tienda de vinilos?
Eso es lo que espero de una tienda de vinilos, que me haga escuchar algo nuevo. Creo que su verdadero objetivo es observar y escuchar a quienes entramos, para ofrecernos música que pueda gustarnos. A pesar de esta afirmación, surgen preguntas cómo: ¿Y si solo quiero ir a comprar lo que conozco? ¿Y si no me gusta que me hablen mientras busco vinilos? Entonces, ¿cuál es el propósito de ir a una tienda?
¿Solo percepción o tendencia?
Con esa duda, lancé una pregunta en un grupo de WhatsApp con amigos coleccionistas: «En sus últimas visitas a tiendas de vinilos, ¿en cuantas de ellas han descubierto música nueva, ya sea por una portada que les llamo la atención o el «vendedor» les recomendó algo?»
La respuestas fueron estás:
Yo hace como 5 meses que no , lo que hago y siempre hacia es descubrir música nueva en Tea Recs, ahí he encontrado música nueva. Pero, si hace mucho que no descubro música nueva.
Juan Manuel (Tornamesa)
Yo tengo la costumbre en ciudades nuevas preguntar directamente en la tienda por algún disco que crean que no encontraré fuera de su tienda.
Julio Pulido
8 han sido recomendaciones directas por los vendedores en este año. Todo lo demás que he comprado es yéndome a la segura.
Miguel (MM_MUSIC_25)
Prácticamente cada vez que voy. En especial los Diegos (tanto de Tea Recs como de Perfecto Miserable) son grandes conocedores y si les pides recomendaciones, tienen algo que ofrecer.
Bernardo Arteaga
La mayoría del grupo vive entre Guadalajara y Ciudad de México. Aunque las respuestas tienden a reflejar más en Guadalajara, las opiniones están divididas. Aún si, me interesaba saber si era solo mi percepción o una tendencia más general.

¿Dónde quedó la experiencia?
La razón de este texto es que, en mis últimas visitas he notado una creciente falta de atención hacia los clientes. Puedes pasar un buen rato haciendo digging sin que nadie se acerque a preguntarte si necesitas algo. En una de estas visitas, afuera de la tienda había un grupo de personas comiendo y bebiendo. Después de un rato, alguien entró y me preguntó si necesitaba algo. Me lleve un vinilo que llevaba mucho tiempo buscando, me cobraron, me ofrecieron una bolsa… y volvieron a salir. ¿ Y luego?
Volvamos al punto inicial: ¿cuál es la razón de tener una tienda si no hay interés en vender música? Porque eso es. Tú me vendes, yo descubro. Y de ahí nace todo lo demás: comunidad, conciertos, listening parties o lo que quieras. Puedes agregarle todas las experiencias del mundo a una tienda de vinilos, pero no se debe olvidar los más esencial: ofrecer la posibilidad de descubrir música nueva.
¿Ustedes que opinan?, ¿Qué esperan de una tienda de vinilos?

Escrito por Fercho Valdivia.
Como coleccionista de vinilos, me interesa la música más allá del sonido: su historia, su contexto y su influencia. Utilizo la fotografía y la lectura para profundizar en su evolución.
Insta: ferchovaldivia