Una exótica combinación de blues, rock, jazz y uno toque de balcánico.
Wolf wolf es un dúo dedicado al rock blues y The Tuzemak Orchestra está llena de jazz y toques balcánicos
Esta producción cuenta con un excelente balance, la apertura con Monster nos regala un estilo de rock blues acompañado de trompetas. Tuzemak impecable con sus ritmos balcánicos e influencias jazz. Lucifer Count Vlad y I crushed the Devil son baladas que exploran los vocales aguardentosos notas de country y toques de jazz. The wolfs are coming cierra con un rock jazz explosivo.
De inicio a fin escuchamos una gran cantidad de ritmos y sonidos, que destacan por el increíble trabajo de producción, ,colocando cada instrumento en su lugar. Logrando una fluidez sonora impecable.
Es momento de viajar a las lejanas tierras de Japón por una dosis de rock.
Su sonido es una base solida de rock pero al sumarse los minutos encontramos influencias del psicodélico, stoner y un toques de doom.
Fire in your in eyes, es rock puro y acelerado con grandes riffs de guitarra, los vocales tiene un tono cercano al heavy metal de los ochentas. Electric Church y Dissolution hacen notar los toques de stoner, además de bajar la velocidad dejando notar las raíces doom. Black eyes nos regala riffs psicodélicos, haciendo una conclusión épica para este viaje.
Witch and Her Iron Forest, es un disco que nos lleva un sonido de antaño, crea una excelente combinación de los géneros mencionados. Es el balance musical lo que hace un disco placentero de escuchar.
Mi recomendación es que los escuchen a todo volumen.
Algiers destaca por su combinacion de soul, rock, post- punk y gospel. Enfocando sus lanzamientos en un enfoque político, lo cual producía un sonido agresivo, acelerado y con rabia.
Para este tercer lanzamiento que lleva por nombre There Is No Year, aún con tintes políticos pero es un camino más humano, toques hacía los problemas internos y el conflicto de enfrentar una realidad, por lo tanto es una producción mas intima. Hour of the furnace, Losing is ours y Unoccupied en sus letras podemos encontrar estos sentimientos.
Por su parte musical nos lleva por una pasaje instrumental un tanto repetitivo con toques de rock y electrónica, predomina el uso de beats que sin duda son interesantes manteniendo un suspenso que no llegan a un desenlace. Los acompañamientos del saxofón agrega el toque sutil del jazz, los vocales destacan el mayor tiempo acompañados de tonos gospel.
There is no year,Dispossession y Chaka son algunos de sus tracks con más energía, en especial esta última donde los sintetizadores y la intervención el saxofón son excelentes.
There Is No Year es una producción alejada de los lanzamientos previos, la ambientación y la construcción instrumental lleva más calma con un tono de análisis e introspectiva. Sin duda es extraño escucharlo y al mismo tiempo es una experiencia diferente ya que hace falta la parte explosiva que caracteriza a Algiers.
Esta edición viene en single jacket, el vinilo en color negro. La inner sleeve esta impresa con un texto que sirvió de inspiración para la letras. También incluye un flexi-disc en color azul transparente con la canción Void.
Siempre se necesita una dosis de rock en nuestras vidas.
En once canciones nos vamos a deleitar de un rock rápido, conciso y psicótico. Red Scare Revival arranca sin temor con Ghost of F.O.E riffs de guitarra pegajosos y unos vocales aguardentosos. Everything Is Nothing, Self Depravation and Clinical Insanity y Kill the Scene comparten unas excelentísimas líneas de bajo y unos ritmos en el teclado brutales. Mirror Mirros con su batería y riffs que me recordaron al género surf, aquí tenemos una interesante transición que poco a poco nos presenta Red Scare Revival que nos lleva a una psicodelia sonora.
Su contenido lírico nos lleva por la rebeldía, desamor y locura, solo por mencionar algunas. » I´ll never be, I ´ll never be a puppet for them I´ll never be, I ´ll never be A poster boy of pain» nos dice Revolution o Love Ain´t Real to You que nos regala estas líneas » And all those times you told me weren´t true love, Love Ain´t Real to You, Now my fears they, They come in twos».
Sin más que decir y mucho por escuchar es momento de salir de esta reseña y ponerse los audífonos.
Probablemente mi estado emocional sea más fácil de expresarse con este disco, de lo que mi palabras pudieran describir.
Chimes At Midnight es un álbum que nos envuelve en sonidos que nos llevan a la melancolía, ilusión y deseo. En algunos momentos también nos da pinceladas de amor con toques de tristeza.
Desde la apertura con Nobody Loves You Like I Do, los teclados y bajo le ponen el acento a melancolía mientras la voz nos da el abrazo final. Running For The Love of Your Life y Emprire Blues comparten influencias entre la delga línea del blues y country. Help Your Self To Me e Imagination incorporan vocales femeninos en sus coros provocando una atmósfera más profunda. Por su parte Stabat Mater y Call My Name son las únicas que incorporan exquisitos solos de guitarra.
Las letras son profundas y con mucho sentimiento, Nobody Love You Like I Do nos regala; «Maybe It´s not enough Nothing ever is, It always starts and ends with a kiss, You give yourself away» Help Your Self To Me, es una canción que me hizo sentir esa desesperación por ayudar a alguien que amas y no puedes. » Why you´re lookin at your telephone? Why this loneliness comes to our home, I´ll be coming from the land of my dreams, When it´s time for you to join me, baby. El cierre con Ecstasy es una carta de despedida que dice: » When I am gone and none remain, To clear your eyes and know your pain, Carry on, little river sadness»
Chimes At Midnight es honesto, las letras nos llevan por un camino de sentimientos que estoy seguro alguna vez han experimentado, que van del desamor hasta la preocupación. Esa es la magia de este disco, lo humano en su música y sus letras.
El álbum suma doce canciones con un total de cincuenta y ocho minutos, esperamos pronto adquirir el vinilo para disfrutar esta producción como se debe.
Lucifer On The Sofa es un deleite sonoro con una diversidad de ritmos que provocan un remolino de emociones.
La calidad musical es impresionante, cada canción incorpora poco a poco elementos que van alimentado su complejidad sonará. De manera muy sutil nos deleitan con “mid riffs” de guitarra, coros y sintetizadores, que en un momento se convierten en un solos de guitarras o explosiones de sonidos que nos sumergen en una experiencia auditiva insólita.
Algunos ejemplos de este dinamismo los encontramos en; The Hardest Cut que explota con un impresionante bajo al que suman unos riffs y solos de guitarra exquisitos. Wild sube y baja, sus sintetizadores agregan energía disfrazada de melancolía. Astral Jacket por sus vocales y coros, una balada que llega al corazón. Satellite, es impresionante la forma en que escala su sonoridad, de notas tranquilas en los teclados a un explosivo riff de guitarra.
Las letras son un deleite, algunas de mis favoritas son, Wild que dice;“An the world still so wild called to me,I was lost I’d been kept on my knee”. My Babe; “What do you get when you add it up, The same walls every day and night, But there you were there you are, Down somewhere we used to know, We used to go” El cierre con Lucifer on the sofa, “What am I gonna do, With your last cigarettes, All your old letters, Everybody knows, That I’m lost with all your pictures”.
La genialidad de este disco radica en que cada elemento está en el lugar correcto. Nada sobra y nada falta. A cada momento nos sorprende con energía y su mezcla de sonido. Este disco entra a mi top de favoritos.
Howllers esta semana he tenido un caos emocional pero nada que una dosis de stoner y psicodelia solucione.
Nos vamos a deleitar con un EP con tres canciones que suman unos once minutos de pura brutalidad sonora.
Cada una destaca de manera impresionante, el inicio con Mindless drone fuck con su línea de bajo y sus vocales en coro la hacen sublime, por otro lado Two minute hate, arranca con la guitarra, agregando más agresividad en los vocales creando un sonido caótico, Man at the door combina dos estilos de vocales agregando un toque desalineado.
Blacksands tienen un gran sonido, sus influencias son claras sin embrago aún están definiendo su sonido. Solo queda esperar y poder disfrutar de grandes próximos estrenos.
Es una noche tranquila de sábado, pase unos cuantos minutos deleitando mis oídos con un alterado sonido de psicodelia que entre sus matices agregaba pinceladas de paz.
The U Book es un viaje sonoro como ninguno, el cual abre con «Sufferring Brothers» donde encontramos la máxima expresión de stoner y psicodelia, la batería con un sonido macizo e incorporando largos y retorcidos riffs de guitarra. «The U Book» es el otro lado de la moneda, nos lleva a un plano de tranquilidad con suaves y tenues melodías, sumergiéndonos en un mar de paz, una canción bellísima. «Following the teachings» es el balance, en la primera parte deleita con un ritmo espectacular con tintes de psicodélico, el bajo es impresionante, la mitad hacia el final el stoner aparece dejando un ritmo armonioso. «Spiritual Seeds», tiene una duración de treinta minutos, las percusiones destacan con su suave y cautivador ritmo acompañados de la batería que se complementan con las distorsiones de las guitarras llevándonos a un trance musical.
Estos cuatro tracks a pesar de tener sonidos y ritmos muy diferentes, conviven en el mismo ambiente, dejando claro la calidad y talento musical que tienen los integrantes además de la capacidad de transmitir sus sentimientos en cada una de ellas.
El disco es jam puro creando este ambiente mágico que nos lleva a un espacio sonoro astral. No solo es psicodelia y stoner, esta producción lleva la improvisación a otro nivel, el sonido es brutal y tan natural que sientes cada sonido como una bocanada de aire fresco.
Howllers tenemos nuestra primera lectura del 2022, estoy seguro que este año encontraremos grandes joyas.
Escrito por Fercho Valdivia.
Como coleccionista de vinilos, me interesa la música más allá del sonido: su historia, su contexto y su influencia. Utilizo la fotografía y la lectura para profundizar en su evolución.
Howllers estamos en una racha de grandes bandas, pero con lanzamiento en formato de single.
Knifeplay nos deleita con dos tracks,Hurt Someone, tiene una línea de rock que se acompaña de shoegaze, instrumentos como el chelo y violín suman un toque melancólico, los vocales se oyen distantes y por alguna razón me recordaron a I Wanna Be Adored de The Stone Roses. Ornament, es caótica, tenemos distorsiones por todos lados que nos llevan a un ruidoso final.
Howllers disfruten estos dos tracks perfectos para iniciar el día, un poco de paz y neurosis.